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HALLOWEEN- ¡NO PARA MIS HIJOS! “No
participéis en las obras infructuosas de las tinieblas, sino más bien
reprendedlas” Efesios 5:11 Halloween está permeando nuestra sociedad,
influenciando los medios de comunicación, usando el comercio, y tomando los
colegios, de manera muy perniciosa y dañina para el bienestar espiritual y
emocional de nuestros hijos. Halloween es real, porque es primeramente
una fiesta espiritual de invocación a las brujas y los demonios. Halloween es
real, porque el mundo espiritual es muy real. Halloween no es una celebración
de niños, sino de adultos. Su intención es inducir e iniciar a nuestros hijos
en la práctica de la brujería. Halloween no es una fiesta inocua e
inofensiva, como quieren sus promotores hacérnoslo creer. Es una iniciativa
intencionadamente maligna, que expone a nuestros hijos a un gran daño
espiritual, emocional y hasta físico a nuestros niños. Cambios repentinos o
inexplicables de comportamiento en nuestros hijos; rebeldía, agresividad,
depresión, temores, pesadillas, pueden ser el resultado de haberles permitido
que nuestros niños y jóvenes participen e involucrarse en cosas como el
Halloween. Cuanto más se expongan a Halloween, peor será el daño moral y
espiritual. Este fin de mes de
octubre, protejamos a nuestros hijos con instrucción y oración. ¿Amén?
Permanezcamos alerta, especialmente este fin de semana y el siguiente.
Intensifiquemos la oración a favor de nuestros hijos, nietos, sobrinos, y en
general a favor de nuestros pequeños y jóvenes. En Halloween y en todo lo que
representa el culto a los muertos, la actividad espiritual del Maligno se
intensifica; no solo en los lugares donde se practica el satanismo y la
brujería, sino en los lugares donde se celebra Halloween: Los colegios,
centros comerciales, medios de comunicación, discotecas, etc. ¿Qué pueden hacer los padres, pastores y
maestros cristianos? ¿Cómo plantar
cara a este reto espiritual que enfrentan nuestros hijos en estos lugares y
entre sus amigos? Algunas sugerencias: 1- No ignores o subestimes el poder que el
Maligno tiene para dañar en estos días. Las Escrituras nos advierten: “para
que Satanás no gane ventaja alguna sobre nosotros; pues no ignoramos sus
maquinaciones” (2 Cor. 2:11). También leemos 1 Pedro 5:8 y 9a: Sed sobrios, y velad; porque tu adversario
el diablo, como león rugiente, anda alrededor buscando a quien devorar; al
cual resistid firmes en la fe, A esto mismo se refiere el apóstol Pablo,
cuando nos manda a que tomemos “toda la armadura de Dios, para que podáis
resistir en el día malo, y habiendo terminado todo, estar firmes”. Lee
Efesios 6:10 al 20. 2- Explícaselo a tus hijos y nietos: Una vez
que tú estés convencido de que esta no es una fiesta divertida e inofensiva,
sino algo que les puede causar mucho daño; entonces, podrás sentarte con
ellos y explicarles por qué no quieres que participen en Halloween, sino que
obedezcan el mandato bíblico de Efesios 5:11: “No participéis en las obras
infructuosas de las tinieblas, sino más bien reprendedlas”. Tú y tu casa
queréis servir al Señor, apartándoos y desechando las calabazas macabras, las
decoraciones de calaveras y muerte, los disfraces de hermosas hadas, de
diablos y brujas. ¿Amén? 3- Ora con tus hijos, invocando la
protección de la sangre de Jesús sobre ellos, sobre tu casa y en su escuela,
y revistiéndoos de toda la armadura de Dios. Hazlo desde ya, pero
especialmente durante la semana del 31 de octubre y los días que se celebra
Halloween en los colegios y en el barrio. 4- En oración y con tu testimonio, usa de
autoridad espiritual y establece la Presencia de Dios y Su Reino en tu
entorno. Si lo ves conveniente, ve y habla con los profesores de tus hijos
para que no les hagan participar de Halloween. Algunos padres apartan ese día
para que sus hijos no asistan al colegio, ya cambio les proveen de otra
actividad espiritualmente segura para ellos. 4- Está
preparado con trataditos y revistas para niños, para cuando acudan a tu
puerta a que les des caramelos, a cambio de no echarte una maldición. Da
testimonio a familiares y vecinos con naturalidad y valentía. 5- Esta es una buena ocasión para que tu
iglesia esté orando alrededor de los colegios de su barrio, haciendo vigilia,
ayunando, y predicando el evangelio. " La oración eficaz del justo puede
mucho, y resulta imprescindible, para proteger a nuestros niños y jóvenes en
estos días malos (St. 5:16 y 17). ¿Amén? USA CON TUS HIJOS ESTA ORACIÓN DE
PROTECCIÓN: Padre Celestial, gracias por darnos la
autoridad, como padres, pastores y maestros, a favor de nuestros hijos. En fe y oración ejercemos esa autoridad, en
estos días de maldad espiritual de Halloween. Señor Jesucristo, gracias por
tu obra perfecta en la cruz del Calvario. Hacemos efectiva esta obra a favor
de nuestros hijos e hijas. Gracias por el poder de tu sangre para proteger
sus vidas y proteger nuestras casas. Ahora, Señor, nos arrepentimos y pedimos
perdón por nuestra ignorancia voluntaria sobre los temas espirituales que
afectan el bienestar espiritual y emocional de nuestros hijos. favor de nuestros hijos e hijas, por su
descuido espiritual y por su falta de obediencia a sus padres ya tu Palabra.
Perdona su rebeldía e involucramiento en cosas del ocultismo, como Halloween.
Perdónalos, sácalos de este pozo oscuro. Sánalos y llénalos con tu Espíritu. Ahora nos vestimos de toda la armadura de
Dios: Ceñimos nuestros lomos con la verdad, nos vestimos del corazón de la
justicia, calzamos nuestros pies con el celo por la propagación del evangelio
de la paz, levantamos el escudo de la fe para apagar todo dardo inflamado del
Malvado, ponemos en nuestra cabeza el yelmo de la esperanza de la salvación y
tomamos la espada del Espíritu, que la Palabra de Dios. Cubrimos nuestras
vidas, a nuestros hijos y nuestras casas con los méritos de la sangre del
Cordero que fue inmolado. ¡Allí estamos seguros y protegidos! Intercedemos por nuestros familiares,
vecinos, por los maestros de nuestros hijos, para que el temor de Dios esté
sobre sus vidas; para que la luz de Dios y la salvación de Dios vengan sobre
ellos. Venga a nosotros tu Reino, hazte tu voluntad, así en la tierra como en
el cielo. Señor, ayúdanos a ser testigos de Cristo para ellos. Gracias, Padre, porque veremos tu gloria,
veremos tu victoria. Gracias por darnos autoridad y protección. El Dios vivo
y verdadero, Él tiene de darnos seguridad, sanación y salvación. Para
nuestros ancianos, enfermos, pequeños y para los más vulnerables. Todos ellos
están cubiertos con la Sangre del Cordero. ¡Aleluya! ¡Gracias Jesús! Canción:
Hay poder, poder, sin igual poder, en Jesús, quien murió y resucitó.
Hay poder, poder, sin igual poder, en la sangre que Él vertió. |